América-Indios… Las Águilas jugarán para Cabañas

Son tres veces las que América e Indios se han enfrentado, dejando un saldo positivo para los americanistas, quienes han conseguido dos empates y un triunfo ante los aborígenes.
El equipo de Coapa tiene la misión de ganar y convencer, no sólo porque los buenos resultados tienen que acompañarlos siempre por la jerarquía de su nombre, sino porque quieren que este triunfo sea dedicado a Salvador Cabañas, quien pelea por mantener su vida tras haber recibido un impacto de bala en la cabeza.
Indios tiene un peso enorme en sus hombros, el equipo ha acumulado 19 partidos sin ganar y si la situación sigue igual, el descenso podría concretarse antes de que el cuadro juegue las 17 Jornadas reglamentarias del Torneo Bicentenario 2010.
Para los aborígenes es hora de despertar ante un equipo que no saben cómo encontrarán tras lo ocurrido al ariete paraguayo Salvador Cabañas.
AMÉRICA
América sufrió el peor golpe que un equipo podría recibir. El cuadro americanista no sólo ha perdido a su delantero estrella y el hombre que se convertía en el salvador de la escuadra en los momentos más importantes, también ha recibido un golpe anímico que podría restarle fuerza.
Salvador Cabañas recibió un impacto de bala en la cabeza que lo mantiene luchando por su vida en un hospital, mientras el equipo tiene que tomar fuerza para seguir entrenando.
El grupo entero y la institución han dejado claro que el domingo van con todo por un triunfo para dedicárselo a Salvador, la institución ha cerrado filas y con el corazón roído ha tratado de enfocarse en lo futbolístico, aunque eso parece hoy lo menos importante.
Sin embargo, Jesús Ramírez ha tenido que poner énfasis en los cambios que tendrá que registrar su estrategia, ante la falta de un delantero natural tendrá que buscar el hombre que supla a Chava, así Enrique Esqueda parece el candidato ideal.
América, después de haber sufrido una derrota frente a Morelia la semana pasada, va por su segundo triunfo consecutivo en casa, pues en la Fecha 1 logró darle la alegría a su gente con un 5-1.